Esta noche, en el ATT Park de San Francisco se reanuda la Serie Mundial con el Clásico de Otoño empatado 1-1, el mánager de los Reales Ned Yost tendrá que lidiar con el reto de tener su lanzador bateando.
Desde 2006, los equipos de la Americana tienen foja de 7-15 en los estadios de la Liga Nacional, donde tienen que renunciar al uso del bateador designado.
Para los Gigantes, se trata de la oportunidad para barrer los siguientes compromisos y poder disfrutar de algo que no pudieron hacer cuando en 2010 y 2012 se proclamaron campeones: celebrar en su propia casa.
San Francisco sustrajo un triunfo 7-1 en el primer encuentro, rompiendo el invicto en ocho desafíos de los Reales en esta postemporada. Pero Kansas City respondió imponiéndose 7-2 en el segundo encuentro, vulnerando al relevo de San Francisco.
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