Pueden llamarlo el Sr. 2.000.
Dusty Baker se convirtió en el duodécimo manager en la historia de las Grandes Ligas en llegar a 2.000 triunfos, luego que los Astros de Houston blanquearon el martes 4-0 a los Marineros de Seattle.
Ningún piloto negro tiene tantas victorias como Baker.
El cubano Yordan Álvarez y el venezolano José Altuve conectaron sendos jonrones solitarios, mientras que el novato dominicano Jeremy Peña remolcó dos carreras para ayudar a que los Astros hilvanaran su segunda victoria.
Dusty Baker entra al club de las 2,000 victorias y se convierte en el primer manager de color en llegar a esa cifra pic.twitter.com/cF69plvzdp
— Víctor Ml. Báez S. (@VicBaezS) May 4, 2022
Diez de los otros 11 managers que han acumulado al menos 2.000 victorias están en el Salón de la Fama. La excepción es Bruce Bochy, quien logró 2.003 pero no es elegible todavía para el recinto de Cooperstown.
El triunfo llegó más de 29 años después del primero de Baker como piloto, registrado el 9 de abril de 1993, cuando San Francisco superó 2-1 a San Luis.
Baker, de 72 años y uno de apenas dos pilotos negros que hay en las mayores, tiene una foja de por vida de 2.000-1.745, y es el único manager en la historia de las Grandes Ligas en llevar a cinco equipos diferentes a la postemporada.
Dijo que ser el primer manager afro-estadounidense en llegar a la cifra en las mayores vuelve más significativo el logro.
“Tiene un significado adicional, para la cultura y la sociedad”, comentó. “También para mi raza y, ojalá, para que otros tengan una oportunidad, de modo que yo no sea el único”.
Se trata del hito más reciente en la destacada carrera de Baker como pelotero y piloto, a lo largo de más de 50 años.
Ha llegado dos veces a la Serie Mundial como manager, incluida la temporada anterior con los Astros y la de 2002 con los Gigantes. Como jugador, acudió tres veces al Clásico de Otoño con los Dodgers y se coronó en 1981, como un jardinero izquierdo de potente bateo.
Pero hubo un momento en que Baker dudó que fuera a recibir la oportunidad de buscar el hito. Tras ser destituido por los Nacionales en 2017, luego de una campaña de 97 victorias, Baker no recibió otro empleo sino hasta que los Astros, manchados por el escándalo del robo de señales, destituyeron a A.J. Hinch.
“Si no hubiera habido un escándalo, yo no estaría en esta posición”, dijo Baker. “Mi teléfono no sonaba. Hubo veces distintas en que perdí empleos y en las dos estaba yo ganando, y no me llamaron por dos años. Así que, sí, todo es cuestión de perseverancia. Y estoy acá, donde se supone que debería estar”.