NUEVA YORK (AP) — La demoledora dupla de Shohei Ohtani y Mookie Betts al tope del orden ofensivo. No batearle a nada fuera de la zona de strike. Y un bullpen que sigue colgando ceros.
Tal es la fórmula que tiene a los Dodgers de Los Ángeles a las puertas de la 22da Serie Mundial en la historia de la franquicia y la cuarta en los últimos ocho años.
Ohtani abrió el juego con un jonrón y anotó cuatro veces, Betts también la desapareció y produjo cuatro carreras, y los Dodgers aplastaron el jueves por segunda noche seguida a los Mets de Nueva York, esta vez por 10-2 para tomar una ventaja 3-1 en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional.
El jueves, la combinación Ohtani-Betts se fue 7-5, con tres boletos, siete carreras anotadas y cinco impulsadas.
En un despiadado despliegue ofensivo de los Dodgers, Max Muncy hizo historia al convertirse en el primer jugador que logra embasarse en 12 apariciones consecutivas durante una misma postemporada.
Para este viernes en el quinto duelo, los Dodgers tienen asignado a Jack Flaherty para abrir y llevarles a la Serie Mundial. Los Mets asignarán la responsabilidad de supervivencia al zurdo David Peterson
Ohtani abrió el juego con un jonrón, ante José Quintana. El astro japonés dejó pasar un primer lanzamiento malo y luego desapareció un sinker que se quedó por el medio del plato, haciendo que la pelota viajase 422 pies hacia el bullpen de los Mets en el jardín derecho-central, para su tercer jonrón en la postemporada.
Este estacazo le dio a Ohtani jonrones en swings consecutivos, ya que su batazo de tres carreras en el octavo inning fue el punto de exclamación en la victoria 8-0 de los Dodgers la noche previa.
El favorito para llevarse el premio al Jugador Más Valioso de la Nacional se presentó sin hits en 22 turnos de postemporada en los que no había nadie en circulación.
“No es sólo Ohtani, tienes que neutralizar a todos los demás”, dijo Carlos Mendoza, el mánager venezolano de los Mets. “Cuando va para el primer turno del juego y conecta esa clase de palo, desde luego que es una buena sensación para ellos. Sabemos que eso no nos iba a derrotar, pero no pudimos ponerles un freno”.
Muncy pegó un sencillo y recibió tres boletos en sus primeros cuatro turnos. Su racha culminó cuando se ponchó ante Danny Young en el octavo.
Quintana no había permitido un jonrón en sus ocho aperturas previas, remontándose al 20 de agosto. El zurdo colombiano no sobrevivió al cuarto episodio. Los pitchers de Nueva York se complicaron al expedir nueve bases por bolas para totalizar 31 en la serie, una cifra sin precedentes en un lapso de cuatro partidos de la postemporada.
Después del jonrón de Ohtani en el primer acto, los Mets respondieron con un jonrón solitario de Mark Vientos contra Yoshinobu Yamamoto.
Inesperadamente como cuarto al bate, Tommy Edman restableció la ventaja para los Dodgers con un doblete remolcador contra Quintana con dos outs en el tercero. El puertorriqueño Kiké Hernández siguió con un sencillo remolcador para el 3-1.
Betts encaminó la paliza al sacudir un doble de dos carreras ante el relevista venezolano José Buttó en el cuarto y luego conectar su jonrón de dos anotaciones frente a Phil Maton en el sexto.
Ambos hits de Betts fueron tras boletos a Ohtani.
“Me pone contento que esté rindiendo tan bien cuando yo estoy en base”, dijo Ohtani sobre Betts. “Está enchufado. Mi deber en ese momento es asegurarme de anotar con todo lo que Mookie batea”.
Evan Phillips se acreditó la victoria al cubrir un inning y tercio de relevo sin permitir carreras tras relevar a Yamamoto.
Abajo 7-2, los Mets tuvieron una oportunidad para apretar el juego cuando congestionaron las bases sin outs en el sexto. Pero Phillips sacó dos outs y Blake Treinen retiró al bateador emergente Jesse Winker con un elevado a la franja de advertencia del derecho.
Ávido de alcanzar su primera Serie Mundial desde 2015 y obtener el título por primera vez desde 1986, Nueva York ha sido superado 30-9 por los Dodgers en esta serie.
Los Ángeles revirtió un déficit 3-1 en la Serie de Campeonato de 2020 y acabó coronándose en la Serie Mundial. Los Mets creen que nada es imposible.